DESAYUNAR como un Rey, ALMORZAR como un Príncipe, y COMER como Mendigo es lo que me dice mi mamá. Siempre en mi casa se le dio mucha importancia a esta primera comida del dia, y bue… en realidad como buena familia cubana, y mas los que somos de provincia* casi nunca lo cumplíamos. En casa comer a cualquier hora estaba en la prioridad de todos los intereses y placeres.
El Desayuno Cubano, la mayoria de las veces es simple, o por lo menos a nosotros nos lo parece, siempre lo preside un buen café, de esos chiquitos pero fuerte, pan de flauta, que no se hace rodajas si no un simple “pedazo” de pan con mantequilla (...que ricooooo un pedazo de pan recién horneado con la mantequilla bien derretida!!!) y café con leche. Muchos dirán: otra vez café?? y si, nuestra versión de Café con Leche, es más leche que café. Esta es la versión más comun, o la mas tradicional, pero no le extrañe que en una de las casas del campo desayunen mas FUERTE, y cuando les digo FUERTE es LITERAL. Esto puede incluir revoltillo o tortilla de huevos, o cualquier “cosita” que haya quedado de la comida de la noche anterior.
La versión de desayuno de mi padre era como para reventar a un elefante y la de Doña. Maria, la abuela paterna de mi marido que cuando la regañaban por comer a deshora se defendía con aquello de ...el estomago no sabe que hora es… En fin, disfruten un buen desayuno cubano y luego a empezar el día, y a trabajar o chismear con la vecina.
* Cuando nos vamos de Cuba, todos SOMOS DE LA HABANA, pero en realidad hay montón de “guajiros” por el mundo.
